Guatemala, 28 de abril de 2020. Ante el peligro latente de contagios por causa del COVID-19 en personas con discapacidad institucionalizadas, el Consejo Nacional para la Atención de las Personas con Discapacidad (CONADI), manifiesta su preocupación por que los centros hospitalarios, de atención y detención, se conviertan en focos de contagio, tal como ha sucedido en otros países.
Esta inquietud surge luego que medios de comunicación dieran a conocer el posible contagio de este virus en un colaborador del hospital de Salud Mental, Federico Mora. Asimismo, se informó que una jueza de paz realizó una verificación de exhibición personal en mencionado centro y fue puesta en cuarentena. A esto se suma la falta de información del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) sobre este problema.
En Guatemala, existen entidades que tienen bajo su protección a población institucionalizada, niños, niñas y adolescentes (NNA) en hogares de abrigo a cargo de la Secretaría de Bienestar Social (SBS), personas con discapacidad mental en centros psiquiátricos a cargo del MSPAS, personas en condición de discapacidad en centros de detención a cargo del Ministerio de Gobernación y adultos mayores con discapacidad en asilos públicos y privados.
Por ello, el CONADI reitera el llamado a las autoridades del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, a establecer un riguroso protocolo de protección, que garantice la seguridad y salud de este grupo vulnerable; dotar al personal hospitalario del equipo de protección necesaria, para que no sean receptores ni transmisores del COVID-19 y preferiblemente que el personal de apoyo no tenga contacto con otros entornos. Así mismo, seguir los protocolos establecidos internacionalmente para la realización de pruebas COVID-19 a los médicos, enfermeros, cuidadores y personas en condición de discapacidad de manera periódica.
Se tiene conocimiento que se ha aislado a un pabellón de manera preventiva ante un posible brote de COVID-19. En este caso, seguir las indicaciones correspondientes relacionadas a guías de limpieza y superficies ambientales COVID-19, y el aseguramiento de los medicamentos prescritos e indispensables.
Con base en la información disponible actualmente y la experiencia clínica, los adultos mayores y las personas de cualquier edad que tienen afecciones subyacentes graves y personas con discapacidad congénita o adquirida, podrían tener un mayor riesgo de enfermarse gravemente. Por lo que necesitan tomar precauciones adicionales.